Hoy no te pido que hagamos el amor, no hace falta... Hay noches en las que no hace falta. Hay días en los que me vale con apoyarme en tu pecho y dormir. Hay momentos en los que solo quiero apoyarme en tu pecho, semidesnudos, o compartiendo pijama, con todo oscuro, con el calor de nuestros cuerpos, tapados con una sábana, una manta, con lo que quieras. Que la habitación sea un escenario para el sonido de nuestros corazones, de nuestras respiraciones al dormir comodamente, amándonos, juntos.
Eso es lo que necesito, una noche abrazada a ti, a tu cuerpo, con tu mano rodeándome mientras mi cuerpo está medio encima tuya, abrazados. Sintiendo la vibración de tu cuerpo, el movimiento de tu corazón, el sonido... 
Tener tu olor para poder dormir tranquila, sabiendo que velas mis sueños, y como cuido yo los tuyos.
Eso es lo que quiero hoy, dormir, dormir abrazada a tu cuerpo y despertarme con un buenos días, a cotinuación una sonrisa y un beso. Ya luego el día decidirá...

Hoy quiero que me hagas sentir especial. Abrázame.

Cabeza hueca...

Después de tiempo aun sigo sintiendo ese cosquilleo, esas mariposas al verte. Hasta mis mariposas sienten mariposas en sus estómagos. Me siguen brillando los ojos cuando me hablan de ti. Sigo poniéndome nerviosa y desinquieta cuando te voy a ver. Aun teniéndote me gusta hacer mil cosas para que te enamores de mi, para que te atraiga y digas... "chica, me encantas".

Que todos tus besos son para mi 

como el primero, sigo sintiendo lo mismo. La misma inquietud, la mismas ganas de besarte a cada rato sin parar. Si me nombran tu nombre me sigue saliendo esa sonrisa tan tonta. Si me preguntan que si tengo algo por ahí, digo que tengo lo mejor del mundo, que nadie tendrá nada de lo que tenemos nosotros.

Sigo sin saber lo que hacer cuando te veo, muchas veces pierdo el rumbo. Me sigo poniendo tímida cuando me miras con esa cara que es para comerte.

Que todas y cada una de tus palabras me alegra la mañana, el día, la tarde y la noche.

Poco a poco vamos conociéndonos más, y yo sigo siendo aquella que el primer día no pudo evitar besarte. Esa con las mismas ganas de pasar miles de días contigo, y la que tenía ese deseo incontrolable de ti. Me gusta esa picardía que nos une tanto. Me encanta pelearme contigo y decirte que no me pellizques o que no me pegues que soy muy sensible y terminar riéndonos. Y sé que no me gustan las discusiones, y que no nos gusta discutir, pero siempre de lo malo hay algo bueno, y podría discutir un millón de veces contigo si me prometes que solo durarán 5 minutos y que la reconciliación será inolvidable, que me dirás que me quieres y te diré que no te dejaré ir porque eres lo mejor de mi vida. Grítame, insúltame. Pero luego bésame y no me sueltes.

Cada día que pasa va a más, esto no disminuye, pase lo que pase, no lo hará.

Porque en toda carretera perfecta hay fallos, baches... No hay nada que sea perfecto, pero por muchas imperfecciones que hayan, esto puede ser perfecto si así lo queremos.

Te quiero cabeza hueca.

Ira.

Esos momentos de ira, ganas de tirar todo abajo. Muebles, jarrones. Tirar las puertas abajo, de un taponazo. Momentos en los que ya, se te nubla la vista, te quedas en blanco, y solo quieres echarte a correr hasta que todas tus ganas se pierdan por el camino, correr como si fueras el primer corredor que quiere llegar a su meta con otros corredores detrás de su persona.
Pegar balonazos, sea el objeto que sea, una lata, una botella, una platina, un balón... todo te sirve para darle con todas tus ganas. Pero si es algo que pesa, es mucho mejor.
Escribir tan rápido que tus manos te echen fuego y te pidan por favor que pares.
Esos momentos de acostarte en un sillón, en una cama, en un banco, en una simple silla. Mirar hacia arriba y decir ¿por qué? y no encontrar la pregunta a esa pregunta, como a muchas.
Y en ese momento piensas... No se puede rebobinar el tiempo atrás. No puedes llevar el pasado al presente. Te has quedado, sin mil momentos más.

Un beso en la frente.

Va y me da un beso en la frente, mirando a lo lejos, a todo lo que tengo detrás, con cara de melancolía, con ojos de cordero degollado y con pensamientos del pasado, recuerdos en milésimas de segundo.
Con ese beso en la frente quiere capturar mis pensamientos, mis recuerdos, quiere que nuestros momentos se paralicen, se queden, se mantengan en la memoria, que se plasmen. 
Quiere agarrar con ese beso todos nuestros recuerdos y no quiere que se vaya ni un mínimo detalle.
Y estemos o no estemos juntos, con cada beso en la frente, me demuestra tanto como si fuera en los labios.

- Porque son esos tipos de besos que te dicen mil cosas que las palabras no te pueden decir -

bidón lleno, ¿o bidón vacío?

Llega ese día en el que todo te rebosa el vaso que llevas llenando por días sin decir lo que piensas, vaso tras vaso llenando un bidón, por no decir las cosas que piensas, por no herir sentimientos, por no hacerle daño, por no cabrearte y ser la persona más antipática del planeta.
Llega ese día, el bidón está casi lleno, le falta una simple gota para virarse. Lo hace,
Te han enseñado a comportarte, ha tener calma, aunque los nervios por dentro se alimenten de tu ser. Y vas y explotas, le haces daño a esa o esas personas con tus palabras, te vuelves loca soltando mil cosas que debías de soltar en el momento adecuado, no te das cuenta que este no lo es, pero lo dices, todo lo de ahora, lo del pasado. Que sí, es pasado, pero para ti sigue vivo por no soltarlo en su momento.
Como digo, lo sueltas, suenan palabras de tu boca con expresiones diferentes, pueden ser cultas pero que hacen bastante daño y no puedes soportar quedarte con nada dentro, y quedarte satisfecha.
Pero ¿Qué pasa luego?
Que luego esa persona no conoce a ti, porque no había conocido a la verdadera persona que eras, no siempre tienen que conocer tu parte buena, y que digan que te conocen, porque si no conocen la parte mala, no te han conocido del todo. Esa persona se acuerda de como te pusiste, le hiciste daño con tantas palabras, y sí podrás remediarlo, pero ninguna persona olvida, puede ser para bien o para mal, pero no olvida. Pero lo intenta.
Ahora, ves las cosas de otra manera, después de que se te vaciara el bidón, ese bidón lleno, lleno de cosas malas que te has ido guardando. Porque claro... las buenas si las decías, para compensar las malas que sentías.
Ahora, te han enseñado poco a poco a soltar lo que piensas, pero claro, el poco a poco solo es un conocido. Sigues guardándote mil cosas más, pero poco a poco, lo vas soltando, de vez en cuando, tiras puntas, o no... indirectas o no.
Pero te han enseñado algo importante porque... si en vez de ir llenando vasos, y con esos vasos llenar el bidón, si en vez de hacer eso, vas vaciándolo, poco a poco... Te quedarás sin nada en el bidón, lo dejaras totalmente seco, o con algún baso que otro, que luego vaciaras. Si haces eso, no explotaras, no le dirás mil cosas que piensas y que no... Aunque, siempre que explotas, todo lo que dices, por muy doloroso que sea, es lo que sientes. No es ningún error de palabra. Y así no te arrepentirás de decir cosas que no quieres. Porque no siempre hay que decir toda la verdad.
Hay cosas que no deben decirse. Pero inténtalo, intenta no explotar, no teniendo nada que decir

algo sobre mí, algo más

¿Querías saber todo de mi poco a poco no?
Pues te diré algunas cosas más de mi. 
Me encantan esos días de lluvia, en los que te puedes acostar en el sillón con la manta viendo una película y comiendo chocolate. 
Me gustan todo tipo de películas, dramas, miedo, comedia, todo tipo, pero eso sí, que no me aburran.
Puedo beberme en un día varias latas de coca cola, puedo pegarme el día entero comiendo chocolate, pero eso sí, no me importa que marca de chocolate, pero las que más me gustan son las tirmas o nestle.
Soy algo maniática de la limpieza, para la higiene, y para el orden. Aunque muchas veces me salto todo dejándolo tirado, pero no por mucho tiempo porque me agobia. 
Me gusta el verano, las olas, ver como las cabalgan, la arena, y sumergirme todo el día en el agua. 
Pero también me gusta el invierno, el taparme hasta los ojos, y dormirme aplastada por mantas.
Hablando de dormir... me encanta el olor de las mantas, porque cada vez que la hago invade la colonia en ellas, sí, colonia de nenuco o parecida. 
Me gusta poner la almohada en vertical y abrazarla para quedarme dormida en ella. 
Me gusta estar con mi familia el máximo tiempo posible, pero eso sí, mi familia también son mis amigos y no me separaría ni un segundo de ellos.
Me gusta abrazar a la gente, conocida y acabada de conocer, y sobretodo hacer regalos y dar a entender lo que quiero a una persona con varios detalles.
Me gusta pasarme horas en el ordenador hablando hablando contigo, con amigos y con mi perro a un lado mío en el sillón, darle cualquier mimo y volver a la pantalla. Me gusta ver en el videos, y estoy todo el día buscando cosas así que... aprovecho algo de tiempo.
Como ves, me encanta escribir, y sé que muchas cosas de estas las sabes, pero me gusta contarte cosas de mi.
Me gustan las camisas de cuadros y la verdad, vestirme algo de raperita o con ropa suelta. Pero también de una forma formal, soy muy yo en esas cosas
Me gusta abrazar a mi madre, molestar a mi hermana, y no parar de reir con mis sobrinas. Como te he dicho, soy muy dada con mi familia.
También me suele gustar ayudar a las personas, intentar que todo el mundo esté bien, y apartar los malos rollos. 
Sí, sé que soy una chica que solo tiene 16 años, pero me gusta estar atenta a los demás y echarles la bronca por algo que hacen mal. Pero también soy la persona que da consejos y no se los aplica.
No me gusta estar mal con nadie, porque sinceramente no aguanto.
Soy la persona más feliz, pero la más triste también. Muchas veces me gusta reír, y muchas llorar.
Una persona que tiene muchos alti-bajos, melancólica la mayoría de veces.
Sí, es cierto, soy una persona que no para de reír por cualquier cosa, y es eso lo que me ayuda muchas veces, ser una persona risueña.
También, también... soy celosa. Lo admito, aunque muchas veces muy poco lo digo pero bueno, no soy tampoco alguien que te sigue tus pasos a cada rato, ni tampoco posesiva. Todo el mundo necesita libertad. Somos personas.
Los animales son mi pasión, sea cual sea, menos los insectos... que no los soporto. 
Me encanta acariciar a cualquier perro que veo por la calle, que se me pongan ojitos tiernos cada vez que veo a un cachorrito, y cuando veo gatitos chicos. Que pena me dan cuando los veo por la calle. 
También soy algo soñadora, estoy fijo en mi mundo imaginándome mil cosas. Imaginándome el día de mañana con todo lo que cualquiera desea, estabilidad, trabajo, una carrera, amigos, fiestas, pareja, fidelidad.
Pero también me cuesta bastante estudiar.
Me encanta aprender cosas nuevas, y leer algo interesante, si no... no leo. 
Me encantan las matemáticas, aunque puedo decir que fácilmente me extreso si no entiendo algo. 
Me gusta darle vueltas al coco, y buscarle soluciones a lo insoluble, y también suelo buscarle las cuatro patas al gato.
Me gusta esos momentos con gorro, una chaqueta de cuero y soltar humo por la boca por el frío, pero no soporto tanto frío. 
Me gusta entrenar con lluvia porque me da más fuerza, y me gusta mirar al cielo y ver como caen miles de gotas desde arriba.
Me encaaaaantan las reconciliaciones, pero no me gusta pelear para ello.
Me gusta el cola cao a cuchara seca, pero no me gusta esas veces que te atragantas y no puedes ni respirar. 
Me gusta mirar la lluvia acostada en el suelo, y ver como van cayendo las gotas descoordinadamente. También que no sé si esta palabra es cierta.
No soy una persona de dar la razón si no la tienes, hasta que no veas que tengo la razón yo, no paro, o bueno sí, suelo dar la razón por no discutir. Pero también defiendo lo que pienso. sea quien sea, contra quien sea, en el momento que sea.
Me gusta dibujar alguna que otra cosa y pasarme una noche entera viendo películas con mi madre.
Me gusta decir todo lo que hago y a todo momento, y a boberías le encuentro la gracia que los demás no podrían.
También me gusta mirar al cielo estrellado, porque me transmite miles de sentimientos que a lo mejor nadie podría saber. Me gusta la noche, porque es ahí cuando todo más me emociona, me pone más ... más todo.
Me encanta escribir con pilos, el color negro y el azul. 
Me parece una tontería las raíces cuadradas que no sirven para nada, saber lo que es un paralelismo,  una anáfora y saber cosas de la historia que ahora no sirven para nada. Saberme las reacciones químicas, y los hidróxidos. Porque nadie irá por la calle preguntándote nada de eso. Aunque quien sabe, a lo mejor sirve para algo.
Me dan ganas de dormir en las clases de historia y lengua, y a veces en ética. Pero también me gusta cuando sacan los temas de los sueños, de los deseos, o cualquier cosa que tengas que razonar tu respuesta. 
Mi color es el azul, mi número el 2, 8. Mi película más triste "A walk to remember"(Un paseo para recordar), de miedo... no hay favoritas. De muertes SAW 5/6, Reflejos. De risa "Resacón en Tailandia" y muchas más, ya sabes que todo me hace reír. De Disney aladdin, hércules, y todas las que te sepas. Mi comida en reuniones, la pizza, en familia algo en salsa. Por lo demás, variedad. Mi hobby jugar al fútbol, aunque me  gustaría practicar todo deporte, me encanta el deporte y mantenerse en forma. Tener vitalidad. Algo que adoro... la música, me gustaría tocar la guitarra, el piano,.. Componer así mi propia canción, con mis sentimientos unidos a cada letra, y cada nota. 
Me encanta mirar los labios, osea... me encanta mirar tus labios, tu espalda, tus manos, tu cuerpo y tus lunares. En realidad... me sé cada parte de tu cuerpo, observo todo.
Me encanta tu voz y tu risa, tanto como tu forma de hacerme reír, o cuando te cabreas y te ríes irónicamente. También cuando te dan tus arrebatos de hiperactividad o de ser cariñosa.
Me gusta esas cosas que compartimos, tanto de pensamiento como de todo.
Me encanta cuando me echas algún alago que otro, cuando me dices que te cante sabiendo que no vengo de La Voz. Jajaja. Me gusta que me mires cuando llevo poca ropa, y que me desees. Me encanta sentirme una persona especial así, a tu lado.  Me gusta tu olor, ese que se me queda durante todo el día, y siempre que lo recuerdo. Hasta los recuerdos llevan tu olor.
Y también me gusta poner algo de gracia a un texto como poner algo subido de tono. 
Bueno, hasta aquí lo dejo, pero quedan muchísimas cosas más que saber de mi, esto es solo un adelanto.

El calor de tu cuerpo contra mi cuerpo

Quererte para siempre, es lo que deseo

Me han dicho por ahí que estoy toda enamorada, que se me ve en la sonrisa y en los ojos. Y yo les respondo:

- No estoy enamorada, aun. Pero si estar enamorada fuera no poder dejar de pensar en esa persona, cada día, cada hora, cada minuto, cada segundo... si estar enamorada es el estar con esa persona, y saber que tienes que marcharte y ya echarla de menos.... Si estar enamorada es besar sus labios, y pensar que es la primera vez que la besas, sentir cada roce, como si te concentraras solo en ello, sentir la suavidad, el movimiento, la textura, la pasión, el deseo, el amor, el sentimiento... Si estar enamorada es querer compartir con esa persona muchísimos de tus momentos... Si estar enamorada es no poder imaginarte ni un segundo sin ella a tu lado... Si estar enamorada es querer reír, llorar,.. tener mil emociones juntas, celar por ver cualquier persona echándole el ojo, darte miedo a perderla, y luchar siempre porque sienta lo mismo cada día de su vida... Si estar enamorada es ver a esa persona como la primera y última que has tenido... Si estar enamorada es quererle hacer el amor, y no "sexo"... Si estar enamorada es sentir cada roce de sus manos, o solo imaginarlo y que se te ponga la piel de gallina... Si estar enamorada es llorar al saber que te alejas... Si estar enamorada es soñar con su boca, soñar con su piel, con sus manos, con su pelo, con su cara, con los pequeños detalles de su rostro, de su piel y de su cuerpo... Si estar enamorada es todo eso, y mucho más.

Pues podría ser que esté enamorada.

Daría mi vida, para ver como sonríes.

- Santana, eres lo mejor de mi -

woouh

Ven, volemos al alto Everest.

Acuéstate, tírate sobre la cama, tranquila, no hay nada que lo impida, estamos solos.

Ahora, acomódate, tienes que estar preparada.

Ropa empapada y cómplices miradas.

Búscame, mírame, observa cada paso que daré.

Cojo tu mano, recorre mi cuerpo, resbala.

Mírame, mira la mirada de deseo, creo que no hace falta papel de instrucciones para ver como funciona esto.

Te paso la mano por el cuello, significa que te besaré hasta cansarme.

Te recorro con una mano todo tu cuerpo, significa que lo deseo.

De una punta a la otra, de una manera o de la otra, roces arriba, roces por abajo. Hoy verás las estrellas.

No te prometo unos buenos días, pero si esta buena noche.

Ahora fuera la ropa, volvemos a lo mismo.

No me des la espalda, la recorreré toda, por cada curvatura, por cada límite de ella.

¿Quieres que pare? Sé que no.

Seguimos, esto acaba de empezar, vamos al fondo de las sensaciones.

Como bien me has dicho, los mejores momentos se viven sin ropa.

¿Qué haces con ella todavía?

subo mis manos, desde tu cintura hasta echar fuera tu camisa. Luego pasaré con un dedo desde tu boca hasta la zona de entrada.

¿Aún llevas pantalón? Es hora de ponerse cómoda.

Mientras observo cada rincón de tu cuerpo, mientras acaricio cada parte.

Vamos echándolo fuera.

Hoy te comeré, y lo digo literalmente. 

Fuera, échalo por el suelo, hasta dentro de unas horas no te hará falta, aquí solo te hará falta compromiso, porque nuestro amor nos lleva a juicio.

Hay que buscar buen ángulo, quiero observar tu cuerpo por varios segundos. Que bien te queda la ropa interior, pero no sirve para nada

¿No crees?

Bien, aquí solo podrás hacer

- Apretarme contra ti.

- Aruñarme.

- Pasar tus manos con ese deseo por mi espalda.

- Gritar.

- Golpear la cama.

- Agarrarme.

- Sujetarte con fuerza al cabezal de la cama.

- Muérdeme o grita mi nombre, respira.

- Disfrutar y mojarte toda.

- Dejarte llevar por la pasión.

Me volverás loco.

· ¿Estás lista? Es lo único que podrás hacer, es únicamente mi turno.

Empezamos, aprétame junto a ti, tendrás que hacer fuerza para poder resistir. Cuerpo con cuerpo, desprendiendo calor sin cesar. Voy haciendo lo que más me gusta, y lo que más te excita, ya sabrás a lo que me refiero. No puedo sentirte así. 

Grita, ya estamos llegando a la zona de peligro, al paraíso, al lugar donde solo podrás chillar para poder salvarte, o al menos... nada, solo podrás chillar. Hazlo.

Golpe, golpea la cama, saca lo que tienes dentro de ti, agárrame, puedes hacerlo todo a la vez, sé que así te dará placer. Bésame y muérdeme si crees que te hace falta, respira, quiero escucharte respirar de esa manera.

Disfruta, disfruta de cada momento, roce o cariño, te trato con dulzura, con pasión, esto es un cúmulo de sensaciones, te estoy tocando y chica, húmeda perdida, me pierdo en tu cuerpo, me vuelvo loco con solo imaginarlo.

Déjate llevar, déjame tocarte, déjame acariciarte, déjame profundizar hasta que lleguemos al paraíso, a lo más alto de la montaña. Descenderemos poco a poco.

¿Te gusta? No me digas que no, tu cara te delata, tus manos te delatan, tus gestos, esos suspiros de esa pasión frenética. Me encanta esa cara, vamos a más, a ver cuanto aguantas.

Mientras te beso, se me escapa alguna sonrisa que otra pícara, pero no pienses nada, me está matando más esto a mi que a ti princesa.

¿Y si ahora bajamos un poco el nivel? date la vuelta. Déjame besar tu dichosa espalda. Te recorro entera, saboreando cada rincón, cada lugar explorado o sin explorar. Llego sobre la nuca, te beso, esos besos tiernos, esos besos pasionales. Hacia la izquierda, solo con mi respiración tiemblas. Beso tras beso, mordisco tras mordisco, no puedo ni hacerlo, no paras quieta,

Después de varios minutos.

Date la vuelta, seguiremos como antes... pero quiero que me digas una cosa primero...

¿Te ha traicionado tu imaginación?

He conseguido mi propósito, disfruta, esto es hacer el amor en forma de texto.

;